Reseña: La Llave Negra (La Ciudad Solitaria #3)

domingo, 1 de octubre de 2017 The Magical Library 0 Comentarios Etiquetas: , , , , , ,


Sinopsis:

Para construir un nuevo mundo, Violet debe destruir su pasado.
La Sociedad de la Llave Negra está preparando su ataque contra la realeza. Violet se encuentra en medio de esta guerra, pero ella arriesga algo mucho más personal: la Duquesa del Lago tiene a su hermana Hazel como prisionera. Violet tendrá que hacer todo lo posible por regresar a la Joya para salvar la vida de su hermana y el futuro de la Ciudad Solitaria.
¿Quién ganará la batalla final?

Reseña:
​Hoy les traigo una reseña que les debía hace bastante: La Llave Negra, el ansiado final de la trilogía La Ciudad Solitaria (aquí pueden leer las reseñas de La joya y La Rosa Blanca).

Primero: ¡guau! O sea, a esta altura ya nos quedó clarísimo que Amy Ewing ama terminar los libros en medio de una escena increíble. Y La Rosa Blanca fue tal como el primer libro: termina con la noticia de que la duquesa secuestró a Hazel, la hermanita de Violet. Pero recordemos desde un poquito antes: Violet, Raven y Ash logran escapar, y Lucien los lleva a La Rosa Blanca, donde van a poder estar a salvo. Allí conocen a Sil, una sustituta bastante mayor, que desafió todas las posibilidades y sobrevivió a su parto gracias al llamado de algo que no podía explicar. Luego se enteran de que sus dones son mucho más que los tres augurios. De hecho, esos augurios las limitan y manipulan sus poderes de forma completamente incorrecta, por eso las deja tan agotadas y les provoca dolores fuertes y hasta sangran. Ellas son mucho más. No están destinadas a tener a los hijos de la realeza, son descendientes de las Paladinas, las habitantes originarias de esa isla, cuya misión era mantenerla a salvo de los invasores.

Otra cosa que sucedía en el anterior libro es que Lucien comienza a rescatar a otras sustitutas con potencial de tener grandes afinidades con los elementos, y así trae a Sienna (la leona), Indi y Olive. Además, comienzan a llevarse a cabo reuniones secretas donde muchos de los habitantes más pobres de los círculos, descontentos con la realeza por muchos motivos, empiezan a organizarse para generar una revolución. Intentan enseñarles a la mayoría a luchar, pero la realidad es que sin la ayuda de más sustitutas resultaría imposible, por eso deciden infiltrarse en los centros de retención, para enseñarles a las chicas que participarán de la próxima Subasta lo que son y cómo usar sus poderes. Esa será la única forma: si luchan desde adentro de La Joya también.

Pero entonces el secuestro de Hazel lo cambia todo, y Violet decide infiltrarse en el palacio de la duquesa, sin pensar dos veces en los riesgos que eso implica. Utiliza los viejos augurios para cambiar su aspecto: cambia su color de pelo por rubio, sus llamativos ojos violetas por verde, y modifica un poco el aspecto de su rostro (todo esto con el increíble dolor que conlleva, claro). Pero nada es más doloroso para ella que pensar en que es de algún modo culpable de que su hermana sea prisionera de la duquesa.

Logra infiltrarse entonces, con la ayuda de Lucien (pese a su reticencia al principio de arruinar todos los planes), y la contratan como criada personal de Coral, la reciente esposa de Garnet. De esa forma tendrían la excusa perfecta para mantenerse en contacto. Allí se entera de que le hicieron cosas horribles a su hermana para que se pareciera a Violet (color de ojos incluidos), y para ocultar el hecho de que la sustituta original había huido. Con un increíble esfuerzo, encuentra pasadizos secretos que la llevan hasta donde mantienen a Hazel, pero no puede hacer nada precipitado para que la duquesa no se entere de que ella se encuentra allí. Es por eso que debe ser extremadamente cuidadosa en todo momento, e intentar llevar su papel como doncella lo mejor posible, a pesar de que nunca en su vida lo hizo, y de que su naturaleza es más bien de contestar que de agachar la cabeza y hacer lo que le piden.

Si bien las cosas avanzan bastante bien, los ataques organizados por los propios ciudadanos son cada vez más violentos, y el hecho de que estén cada vez más alerta a los ataques, hace que deban ser el doble de cuidadosos con su plan de infiltrarse el día de la Subasta. A pesar de varias situaciones que generan unos cuantos traspiés, van a conseguir llegar a ese día crucial, y la batalla se desarrollará, no sin unas cuantas bajas considerables. Se desata una batalla épica: Paladinas contra soldados, plebeyos contra la realeza, y cada uno va a tener que aportar su granito de arena; porque no solo serán necesarias las Paladinas, todos y cada uno de los habitantes y trabajadores tendrán que colaborar si quieren derrocar a la realeza.

Este libro es... guau. Cuando empecé la saga, no me imaginé que iba a terminar de esta forma tan... explosiva y violenta. Es muy crudo, y muy realista a mi parecer, porque están desde los que quieren formar parte de la primera línea de batalla, hasta los que son cobardes y no quieren tener nada que ver con todo esto, en su gran mayoría por miedo, porque no creen que puedan vencer. Es la historia de una revolución que pretende liberar a los oprimidos de una realeza completamente injusta y esclavista, y si bien sucede en una sociedad inventada, perfectamente podría estar contando alguna de las tantas revoluciones que tuvieron lugar a lo largo de nuestra historia.

Si llegaron hasta acá en la trilogía, no hay mucho más que contar. Ya conocen a casi todos los personajes, saben cómo es cada uno, y sabemos sobre todo que Violet y Lucien son capaces de cualquier cosa por defender sus ideales, así como Ash, Sil, Raven, e incluso las otras sustitutas, quienes poco a poco aceptan su nuevo rol de Paladinas. Vamos a volver a encontrarnos con personajes del primer libro cuando Violet regresa al palacio de la duquesa, y vamos a ver otra cara distinta de cada uno de ellos: Violet ya no está allí para que le sirvan, ahora es parte de los sirvientes, ahora está del otro lado, y aunque como sustituta era tratada con bastante desprecio, igual vivía rodeada de lujos y sirvientes. También tiene que enfrentarse a Cora, mamá de Annabelle, tras la muerte causada por su propia desobediencia.

En fin, reafirmo mi opinión de que Amy Ewing tiene una forma muy atractiva de contar una historia, creo que le sacó todo el provecho que podía a cada personaje, e hizo que cada uno de los que murieron o vivieron tuvieran un significado, un por qué. No me parece que hubiera tomado ninguna decisión al azar, cada situación y cada escena tenía una justificación. Incluso siendo el tercer libro seguimos dándonos cuenta de que las escenas del primer libro habían tenido un porqué, hasta la más tonta (como cuando Garnet despeina "accidentalmente" a Violet en el primer libro, y de esa forma Lucien puede hablar en privado con ella), todo tiene una explicación o una consecuencia, y eso fue lo que más me fascinó, cómo prestó atención hasta al más mínimo detalle. Todo esto lo hizo reinventando los géneros en los que no se estaba viendo nada muy nuevo; consiguió armar una historia propia y llevarla hacia donde ella quiso, no por seguir una "moda", o al menos así me pareció a mí.

¿Qué les pareció el final de la trilogía? ¿Era lo que esperaban?
¿Qué personaje es su favorito? Yo me quedo con Violet y Lucien a morir ♥


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