Reseña: Una venganza mortal (Vengeful - Villians #2)


Sinopsis:

Aliados. Enemigos. Villanos. Ellos son ExtraOrdinarios. 
Eli Ever y Victor Vale eran simples estudiantes de medicina cuando descubrieron que las experiencias cercanas a la muerte pueden, si se dan ciertas condiciones, manifestar capacidades extraordinarias.
Fueron muy amigos, luego rivales y, por fin, enemigos. Estuvieron muertos, revivieron, y más tarde… Eli mató a Victor de una vez por todas.
Al menos, eso creía. Pero Sydney Clarke no estuvo de acuerdo y usó su propio superpoder para inclinar la balanza. Ahora, un trío se esconde en las sombras, mientras otro aprovecha la vida después de la muerte para apoderarse de la ciudad de Merit.
Si puede haber vida después de la muerte… ¿habrá calma después de la venganza, o prevalecerá el caos?

Reseña:
Buenas, buenas, hoy les traigo la reseña de esta esperadísima continuación: Una venganza mortal (Vengeful), de Victoria Shwab.

No tengo ni idea de cómo empezar esta reseña. Bueno, sí, lo primerísimo: SPOILERS DEL ANTERIOR LIBRO. No leas esta reseña si todavía no leíste Una obsesión perversa (Vicious) –reseña aquí– porque es inevitable hablar de esta continuación sin hablar de puntos clave de la primera parte.

Arranquemos por donde me gusta arrancar siempre, un breve recap de dónde nos dejó el anterior libro: Victor y Eli terminaron en una guerra, y básicamente Eli mató a Victor. Chan. Obvio que no se iba a quedar muerto, pero qué buen final. También había muerto Dol, el adorable perrito que seguía a Syd por todas partes. Y obvio, esta niñita que no puedo amar más los revive a los dos.

Ahora, ¿cuál es el problema? Que ya sabían, por la experiencia con el anterior EO que había traído de vuelta de la muerte, que no volvían 100% sus poderes. Y entonces confirmamos lo peor: que Victor vuelve, pero no puede aprovechar sus capacidades perfectamente, y, lo peor, tiene unos ataques repentinos en los que se APAGA. O, mejor dicho, se muere por unos breves momentos, y en ese instante pierde control de sus poderes. Esto obviamente va a ser un gran problema por muchísimos motivos, pero no quiero adelantarme.

Retrocedamos un poquito, porque esta segunda parte de la saga Villanos no empieza con la muerte de Victor, sino con Marcella, un nuevo personaje que será muy importante, y muy fuerte, cinco años después del anterior libro. Y empieza como solo Victoria Schwab puede hacerlo: con una escena de violencia pura, machismo y... bueno, ya lo leerán. No es spoiler si les digo que este nuevo personaje será un EO, porque ese es el chiste de este libro, y el poder que va a desarrollar es tan violento como su personalidad lo demuestra. Otra vez, no quiero adelantarme mucho. Saben que con Victoria todo es un giro inesperado tras otro, así que no quisiera contarles de más. Pero sepan esto: Marcella no piensa quedarse callada ni ser sumisa. Sabe que va a tener que abrirse paso entre los cabecillas de mafia quienes, obviamente, son hombres, y no ven a una mujer como una amenaza. Pobrecitos.

Algunas personas eran como fósforos: un poco de luz y nada de calor. Otras eran como hornos, todo calor pero poca luz. Y, por último, muy raras veces, aparecía una hoguera, algo tan caliente y brillante que uno no podía acercársele sin quemarse. Marcella era una hoguera, de eso no cabía duda.
Y entonces empiezan las idas y vueltas temporales, porque algo que amo de estos libros es que Victoria va y vuelve entre pasado y presente, y esto hace que podamos conocer, en el momento justo, detalles de los personajes que nos irán dando una idea de por qué son como son, y por qué nada es blanco o negro, bueno o malo. Algo que sucede en este libro es que conoceremos mucho más a Eli, quien nos resultaba una total incógnita en el primer libro, y si bien en palabras de la propia Schwab ahora podemos conocer el por qué de este personaje... bueno, no es como que podamos obviar el hecho de que va por la vida matando y creyéndose Dios... ¿o sí?

¿Era posible que ocurriera algo en ese momento de vida o muerte, ese túnel entre la oscuridad y la luz? ¿Era una locura creerlo? ¿O era arrogancia no creerlo?
¿Qué va a pasar, entonces? Que además de la eterna lucha entre Victor y Eli (aunque él desde una prisión de máxima seguridad para EO, en paradero desconocido), de pronto se van a encontrar con que otros EO aparecen en el mapa, y Merit se va a convertir en una especie de campo de batalla por ver quién es el peor y más malo. Las alianzas por un lado, y las persecuciones por el otro, van a hacer que no podamos soltar ni un minuto este libro que, pese a su extensión, se lee en nada.

Bueno, creo que les voy a dejar esta reseña hasta acá. Sí, ya sé, no dije mucho, pero es Victoria Schwab, como que no tengo que explicarles lo genial que es esta mujer, ¿no?

Recuerden que, al igual que el primer libro, Victoria decidió que cada uno de estos termine de forma bastante conclusiva. ¿Por qué? Porque sabe que nunca hay que dar por sentado que vayan a publicar sus continuaciones, y prefería dejar a les lectores con la sensación de que, en caso de suceder eso, había un cierre. La amo, ¿les dije que la amo? Ahora, sabemos que queremos leer el siguiente, obvio, porque este no quedó tan cerradito como el primero así que esperemos que no se haga rogar esta tercera parte (¿y última?) porque sus libros son como una droga y yo ya estoy con abstinencia.

¿Leyeron algo de esta autora? ¿Les gusta?

2 comentarios:

  1. ¡Holaa!

    Leo la reseña un poco por encima porque todavía no he leído el primero y tengo mucha curiosidad por hacerlo :D
    La verdad es que todo el mundo habla maravillas de esta autora, y ya va siendo hora de probar con ella jajaj

    ¡muchos besos!

    ResponderEliminar
    Respuestas
    1. ¡Sííí! Ojalá puedas leerla pronto, tiene bastantes libros publicados para elegir por dónde empezar, pero la verdad hasta ahora todo lo que leí lo amé :D

      Saludos

      Eliminar